El exagente de la CIA Luis Posada Carriles dijo ayer que continuará su "lucha" mientras haya gente con hambre en América Latina, y aseguró que su reciente exoneración demuestra que el poder judicial es independiente en Estados Unidos.
"No estoy cansado", manifestó Posada Carriles, de 83 años, en la primera rueda de prensa que ofreció en el sur de la Florida en los últimos cinco años.
La rueda de prensa tuvo lugar menos de una semana después que un jurado de El Paso, Texas, declaró inocente a Posada Carriles de los cargos que enfrentaba por perjurio, obstrucción de la justicia y fraude migratorio.
Posada Carriles se filtró en Estados Unidos en el 2005, y durante el juicio realizado en El Paso, Texas, fue acusado de mentir en las audiencias de inmigración sobre cómo entró y sobre una supuesta orquestación de atentados dinamiteros en Cuba en 1997, uno de los cuales mató a un turista italiano e hirió a 12 personas.
En 1998 admitió en una entrevista con el diario New York Times que había planeado los ataques.
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