Los mexicanos mañana van a las urnas para elegir al nuevo presidente; los 79,5 millones tienen que elegir entre cuatro candidatos.
El aspirante presidencial del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, mantiene una cómoda ventaja en las últimas encuestas publicadas.
Su ventaja sobre el candidato izquierdista, Andrés Manuel López Obrador, va desde los 10 puntos porcentuales hasta los 18,6.
Peña Nieto tiene un 41 por ciento de las intenciones de voto efectivas (sin contar indecisos o quienes no declaran su preferencia) frente a un 31 por ciento para López Obrador, candidato de la coalición de izquierda Movimiento Progresista.
En la tercera posición de las encuestas se ubica la conservadora Josefina Vázquez Mota, del gobernante Partido Acción Nacional (PAN), con 24 por ciento , y en último lugar el aspirante de Nueva Alianza, Gabriel Quadri, con solo 4 por ciento de las simpatías.
UN PACTO Los cuatro candidatos a la Presidencia de México firmaron el pasado jueves un "pacto de civilidad" para respetar la voluntad que los ciudadanos expresen mañana en las urnas, "sea cual fuere el resultado" de la votación.
El pacto fue firmado en la sede del Instituto Federal Electoral (IFE) por la candidata del Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota, a quien siguieron el aspirante de la coalición Compromiso Por México, Enrique Peña Nieto, el abanderado del Movimiento Progresista, Andrés Manuel López Obrador, y el candidato del Partido Nueva Alianza, Gabriel Quadri.
DESCARTAN FRAUDE La posibilidad de un "fraude generalizado" en los comicios de mañana en México es muy difícil, pero no se descarta que se produzcan algunas irregularidades en la votación, coincidieron ayer varios expertos consultados por Efe.
La mayoría de los analistas cree que el Instituto Federal Electoral (IFE) está mucho mejor preparado que en los últimos comicios para garantizar unas elecciones transparentes y limpias, si bien aún existen viejas prácticas de los partidos que buscan incidir en el sentido del voto por medio de dádivas.
Según los expertos, los partidos han puesto en marcha su maquinaria para movilizar el voto y se han dado condiciones desiguales de competencia, pero ello no quiere decir que se vaya a producir un fraude que involucre a servidores públicos y suponga quitar votos a un candidato para adjudicarlos a otros.
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