El expresidente sindical de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, Terence Bonner, enfrenta la posible condena de hasta 240 años de prisión, mientras otros 15 agentes son investigados por homicidio y corrupción, entre otros delitos.
Nunca antes en la historia reciente tantos oficiales federales fronterizos enfrentan simultáneamente tales cargos y tan severos por parte del Departamento de Justicia, señala el diario mexicano El Universal.
Todos los casos se ventilan en cortes federales en San Diego, California. Según Laura Duffy, procuradora federal para la frontera de California con México, el exlíder sindical robó y engañó a unos 14 mil patrulleros fronterizos. Bonner, por más de dos décadas, hurtó cientos de miles de dólares para pagar lujos, incluida amante en Chicago, y financiar viajes de placer propios y de su familia.
Homicidio. Un gran jurado federal, también en San Diego, delibera sobre la muerte del mexicano Anastasio Hernández Rojas, indocumentado padre de cinco hijos estadounidenses, ocurrida en mayo de 2010. Doce legisladores federales exigieron al Departamento de Justicia aclarar la muerte tras observar un video donde se aprecian a por lo menos 12 agentes fronterizos que golpean con saña y aplican hasta cinco descargas eléctricas inmovilizantes. El servicio forense del condado determinó que la muerte de Hernández Rojas fue un homicidio.
También, se investigan a los hermanos Raúl y Fidel Villarreal, y Héctor Rodríguez por la internación ilegal de inmigrantes. EFE
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