viernes, 14 de septiembre de 2012

La furia musulmana crece con protestas en Egipto y Yemen

La calma no llega a los países musulmanes tras el asalto al consulado de Estados Unidos en Bengasi, Libia. En Egipto y Yemen, Irán o Gaza las protestas contra la película estadounidense que ofende a Mahoma, La inocencia de los musulmanes, aumentan en una espiral al parecer indetenible.

Ayer 200 personas se manifestaron violentamente en El Cairo y al menos una persona murió y otras 20 resultaron heridas durante los choques entre manifestantes y la Policía en inmediaciones de la embajada estadounidense en Saná, Yemen, informaron a EFE fuentes médicas. Las fuentes precisaron que las víctimas sufren heridas de balas y de esquirlas por los disparos de los efectivos antimotines.

En Yemen, centenares de manifestantes lograron irrumpir brevemente en la embajada durante una protesta.

Según constató el diario español El Mundo, los manifestantes derribaron la puerta principal de la legación diplomática, donde también se ubica la residencia del embajador. Dentro del recinto, sólo alcanzaron el patio interior ya que no consiguieron entrar en ninguno de los edificios del complejo, aunque lograron quemar varios vehículos oficiales y romper los cristales de las ventanas de algunos inmuebles.

Los infantes de marina de la embajada dispararon al aire para dispersar a los manifestantes, mientras la Policía antidisturbios yemení lanzaba gases lacrimógenos y empleaba cañones de agua para dispersar a los participantes en la protesta.

Los marines enviados por el Pentágono a Libia ya han llegado a la zona y estaban tomando posiciones en la embajada de EEUU en Trípoli, informa el diario español El País. A su vez, el Departamento de Defensa ha comenzado a reubicar su flota en el Mediterráneo y ha enviado dos barcos de guerra a las costas libias.
Violencia en El Cairo

En tanto, los disturbios continaron durante todo el día en inmediaciones de la embajada estadounidense en El Cairo.

Varios cientos de manifestantes se enzarzaron en choques esporádicos con el cordón policial que protege la misión diplomática. Más de 200 personas resultaron heridas en los choques intermitentes. La mayoría fue atendida en el mismo lugar de los choques, en las calles aledañas de la emblemática plaza Tahrir, por fracturas, hematomas y traumatismos.

Pertrechada de mascarillas para mitigar el escozor de los ojos, la turba -formada en su mayoría por jóvenes- arrojó piedras y cócteles incendiarios contra los antidisturbios que trataban de impedir los sucesos del pasado martes, cuando unas 2.000 personas protestaron frente a la legación y un grupo escaló su muro para arrancar la enseña estadounidense y reemplazarla por una negra con la “shahada” o profesión de fe islámica: “No hay más dios que Alá y Mahoma es su profeta”.

Las protestas contra EEUU se extendieron ayer también a Irán y a la ciudad palestina de Gaza. En Teherán, unos 500 islamistas se manifestaron ante la embajada de Suiza y reclamaron la muerte del director de la película, Sam Bacile.

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