El reelecto presidente de Venezuela, Hugo Chávez, destacó la carrera meteórica del nuevo vicepresidente, Nicolás Maduro, quien hasta hace algunos días se desempeñaba como canciller.
El ascenso de Maduro es asombroso. Con tan solo un título de bachillerato, comenzó como chofer de los buses del sistema del metro de Caracas. Durante su proclamación como presidente, la noche del miércoles, Chávez señaló con admiración este hecho.
“Miren dónde va Nicolás, el autobusero Nicolás. Era chofer de autobús en el metro, y cómo se han burlado de él”.
Más tarde fue sindicalista y militante político. Su actividad parlamentaria arrancó en 1999, al ser miembro del Movimiento Quinta República (MVR), fundado por Chávez.
Finalmente se convirtió en presidente de la Asamblea Nacional desde 2005 hasta 2006. En su historial destaca el haber estado preso por la rebelión militar de Chávez, a quien apoyó desde un comienzo.
Así como Jaua (el político de izquierda, Elías José Jaua Milano, 1969), Maduro es considerado del ala moderada del círculo más próximo al Presidente venezolano, a diferencia de otros estrechos colaboradores como Diosdado Cabello, un ex militar que participó en el fallido golpe de Estado que Chávez encabezó en 1992, y actual presidente de la Asamblea Nacional.
Como canciller, Maduro adoptó al pie de la letra el discurso “antiimperialista” del Presidente, hostil a Estados Unidos, así como la defensa de los regímenes de Siria o del fallecido líder libio Muamar Gadafi.
A la vez, Maduro participó en los procesos de integración regional impulsados por Venezuela en los últimos años, como la CELAC, así como en las negociaciones con los nuevos socios político-económicos de Venezuela, como China y Rusia.
En los últimos meses, durante la convalecencia de Chávez por un cáncer detectado en 2011, Maduro adoptó un papel más protagónico en la diplomacia venezolana al llegar a reemplazarlo en citas internacionales, como la Cumbre de las Américas, celebrada en Cartagena (Colombia) en abril. Su nombre al mismo tiempo fue uno de los que sonó con más fuerza como posible sucesor de Chávez durante los meses en que éste luchó contra el cáncer.
La noche del miércoles, la reelección de Chávez fue oficializada por el Consejo Nacional Electoral (CNE). El actual Presidente obtuvo 8,13 millones de votos (55,26%) frente a 6,4 millones (44,13%) de Henrique Capriles.
No obstante, ayer se informó que aún falta computar los sufragios emitidos por los venezolanos en el exterior.
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