El presidente estadounidense Barack Obama se adjudicó estados clave como Pensilvania, Wisconsin y New Hampshire, y va adelante en Ohio, el botín principal de esta contienda, mientras Florida se perfila como la gran incógnita, con una situación de paridad cuando ya se escrutó más de 90%, con ventaja para el mandatario.
Además de Florida, la batalla sigue estando en Virginia y en particular en Ohio, y es que ningún candidato republicano llegó a la Casa Blanca sin ganar los votos de este decisivo estado. Mientras Virginia podría acabar el manos del candidato republicano, Mitt Romney, el segundo parece inclinarse a Obama.
Si Obama acaba imponiéndose en Ohio, Wisconsin y Iowa, Como sugieren los primeros datos, tendrá la reelección en el bolsillo.
Por el momento Romney ganó en en los bastiones republicanos, Texas, Wyoming, Kansas, Kentucky, Nebraska, Dakota del Norte, Dakota del Sur, Tenesse, West Virginia, Alabama, Mississippi, Louisiana y Carolina del Norte. También se impuso en Indiana, estado muy republicano que en 2008 había sido conquistado por Obama.
En la ciudad de Chicago, cuartel general de Obama, una multitud está siguiendo la noche electoral a través de pantallas gigantes colocadas en la calle, y lanza gritos de júbilo cuando llegan noticias positivas para Obama. También en el McComick Center, un mega-centro de convenciones en la ciudad adoptiva del presidente, donde Obama irá a dar su discurso al término del recuento de votos, se escuchan de tanto en tanto estallidos de alegría.
El presidente ganó también en Michigan, además de los tradicionalmente demócratas estados de Nueva York, Maryland, Vermont, Connecticut, Delaware, Maine, Illinois y Nueva Jersey. También se impuso en Massachusetts, donde Romney fue gobernador: una derrota amarga para el millonario mormón, que justamente en Boston está esperando los resultados electorales.
Los estadounidenses votaron hoy, no solo por el presidente, sino también para renovar la Cámara de representantes y un tercio del Senado.
Según la proyección de la CNN, el Congreso seguiría dividido: los republicanos conservarán el control de la Cámara de representantes, y los demócratas el del Senado.
En las últimas declaraciones a la prensa del día, Romney reveló tener listo su discurso de esta noche y aseguró no arrepentirse de ninguna de las decisiones de campaña. "Siento que hicimos todo lo posible", dijo.
Son necesarios 270 votos electorales, de un máximo de 538, para lograr la Presidencia.
La mayoría de los estados adjudican la totalidad de sus votos electorales al vencedor en sus comicios, con la excepción de Maine y Nebraska, que los otorgan por distritos.
Hasta el momento han cerrado los colegios electorales en más de la mitad de los estados además del Distrito de Columbia, de un total de los 50 estados que componen el país.
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