viernes, 8 de marzo de 2013

Últimas palabras de Hugo Chávez: “No quiero morir”

El general José Ornella, jefe de la guardia presidencial de Venezuela, rompió el silencio hermético que hasta hoy envolvía al entorno más cercano a Hugo Chávez Frías.

“No quiero morir, por favor no me dejen morir”, dijo el Mandatario en su lecho de muerte según la versión de Ornella.

“No podía hablar, pero lo dijo con los labios”, añadió el general.

“Él quería a su país, se inmoló por su país”, puntualizó el jefe militar que, con sus declaraciones, generó la molestia de las altas esferas de las Fuerzas Armadas, que pidieron prudencia.

Según el relato del general, falleció de un “infarto, que le dio fulminante. La verdad es que sufrió bastante. Nosotros, que estábamos a su lado, vimos que sufrió mucho con esa enfermedad. Y bueno, la historia la escribiremos y algún día el médico escribirá”, añadió el militar.

Ornella reveló que desde el pasado 8 de diciembre, cuando Chávez habló al país por última vez para informar sobre la reincidencia del cáncer y que debía someterse a una nueva intervención quirúrgica, “sabía que después de esa operación había muy poca esperanza de que saliera con vida. Ese día, de hecho, anunció que el vicepresidente, Nicolás Maduro, sería su sucesor, como parece que será”.

Una enfermedad “silenciada”

Los médicos del Presidente nunca hablaron sobre su paciente, ni se sabe, hasta ahora, qué tipo de cáncer padeció y que órganos afectó exactamente, más allá de la zona pélvica.

La condición de salud de Hugo Chávez comenzó a complicarse a inicios de semana debido a un “empeoramiento” de la función respiratoria y a una “severa infección”, de acuerdo con un comunicado leído entonces por el Ministerio de Información, Ernesto Villegas, que luego corroboró el presidente de Bolivia, E vo Morales, cuando dijo “en momentos está bien y fortalecido, pero rápidamente tiene problemas, así como una recaída”.

De acuerdo con el analista Juan Oletta, “las dudas sobre el al estado de salud de Hugo Chávez no se despejaron, ni siquiera con su muerte. Se han acrecentado”.

Oletta sostiene que “durante meses se minimizó la gravedad del cáncer que padecía el Presidente y cuando la situación se hizo irreversible, el Gobierno llevó a cabo una campaña destinada a ocultar la verdad al pueblo venezolano. Incluso el día de su muerte, el vicepresidente Nicolás Maduro acusó al imperialismo de haber inoculado un cáncer a Hugo Chávez. Todo muy preparado. Todo parte de una gran maniobra mediática”.

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