Pasaron más de tres semanas. La violencia contra los bolivianos en Río Cuarto (Argentina) ha sido controlada y la coyuntura de las noticias, fugaces y volátiles, ahogó de olvido el resto. Pero en el barrio Las Delicias el caso sigue fresco, los saqueos xenófobos a las casas de los migrantes reviven cada vez que alguien, como la paceña Salomé Marcelina Choque, recuerda que le vaciaron el hogar en medio de la ola de ataques que secundó al crimen del joven argentino José Alexis Rodríguez.
Con todo, nadie ha pensado seriamente en volver a Bolivia. Luis Mamanillo, albañil potosino, dijo que llegó a Córdoba en busca de trabajo, que construyó su casa en Río Cuarto y que alguna vez imaginó que volvería al país, pero no ahora. “Pido al presidente Evo que nos ayude a garantizar seguridad; aquí estamos bien”, señaló el boliviano.
Félix Gutiérrez redondea la idea. El presidente de la colectividad boliviana en Río Cuarto, un paceño graduado en sicología por la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), afirmó que una noticia policial argentina hizo que aparecieran en el mapa, logró que las autoridades se enteraran de ellos e intervinieran en su favor. “Cuando pasó la mediación del conflicto, el cónsul Óscar Sanjinés se fue. Los que quieren quedarse, perfecto, se quedan, pero para los que quisieran volver al país, más ahora, no se nos ha formulado un plan de regreso”.
Gutiérrez es profesional, el cochabambino Iver Escóbar es agrónomo, pero ambos encontraron casa y mejores pagas acá como jornaleros. Para Gutiérrez eso no quita la necesidad de un plan de retorno para los que quieran volver, sobre todo hoy, cuando Bolivia se jacta de una bonanza, de crecer de $us 300 millones (2005) a más de $us 14.000 millones (2014) por reservas internacionales y otras cifras.
La respuesta oficial
El cónsul boliviano en Córdoba respondió que la calma se impuso en Las Delicias de Río Cuarto. Afirmó, también, que los bolivianos acusados del crimen de Rodríguez están en manos de la justicia, que hay una comisaría de la Guardia de Infantería de la Policía y que por los desmanes y saqueos a las casas bolivianas ya fueron aprehendidos 20 sujetos; para él, es una minoría que se quiso aprovechar del caos para saquear el barrio.
“Las 16 familias que habían abandonado el barrio por miedo, ya volvieron. Si hay algún plan de retorno al país, eso hay que preguntar a las máximas autoridades de la Cancillería”, explicó Sanjinés vía teléfono.
La consulta fue derivada a la Cancillería. ¿Existe un plan para facilitar el retorno de los bolivianos que migraron en busca de mejores empleos y vivienda, en vista de las condiciones económicas que reporta el Gobierno? Los funcionarios del despacho que encabeza David Choquehuanca no han conseguido una respuesta, solo se ha dicho que no se conocen peticiones formales de los migrantes organizados en Argentina. La propuesta está y los bolivianos de Las Delicias, la mayoría llegados en tiempos de Evo Morales, la esperarán
ANÁLISIS
Un hecho de este tipo no los hará volver
Alejandro Grimson - Analista Argentino
En Argentina de los 90 crecieron la desigualdad, el de-sempleo y el delito. Los funcionarios y los sindicatos culpaban a los inmigrantes, con fuertes campañas de xenofobia. Para ello tergiversaban los datos. En la última década en Argentina creció el empleo y se redujo la desigualdad, pero no disminuyó el delito. Hay un creciente cansancio social respecto de la inseguridad. Hace solo una semana la Policía desalojó con violencia un asentamiento de familias y hubo acusaciones xenófobas. Luego, un funcionario declaró que una gran parte del delito lo producen extranjeros, en una absoluta tergiversación de datos. Ese contexto va generando las condiciones para una reacción xenófoba, que mezcla linchamientos y xenofobia.
No conozco en detalle la realidad actual de Bolivia, pero sí puedo decir que la migración de bolivianos hacia Argentina es un proceso de varias décadas y que los ciudadanos bolivianos no regresarán a Bolivia por un hecho de este tipo. Se defenderán como corresponde, a través de la ley y los reclamos a las autoridades. Y tendrán el apoyo de muchos argentinos. Si usted tiene hijos, casa, pequeños comercios o empresas o un trabajo, no va a regresar a su país ante la primera agresión que sufra
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