Un boliviano muere por riadas desatadas en el norte de Chile

Luis Robert Céspedes Vaca es el primer boliviano fallecido por las inundaciones desatadas en la región de Atacama (Chile). Así lo confirmó a EL DEBER su hermana Silvia Eugenia Justiniano Vaca, quien reveló que su familiar fue encontrado el lunes en la madrugada en medio del barro luego que un turbión arrasara con su casa, ubicada cerca de la ciudad de Calama, reporta el diario El Deber.

Céspedes Vaca, nacido en Santa Cruz de la Sierra, trabajaba desde hace tres años en el sector de la construcción como albañil. Allí había establecido su familia junto con su esposa y su hija, que el 3 de abril cumplirá un año.

"Sentimos mucho esta pérdida, acabamos de enterarnos y estamos preparando el viaje para dar el último adiós a nuestro hermano.
Justiniano Vaca contó que su allegado se fue del país en busca de trabajo. Una tía de ambos fue la persona que le comunicó del deceso.

Más muertos y desaparecidos
La cifra de muertos por el temporal de lluvias que la semana pasada arrasó el norte de Chile aumentó a 18, mientras que más de 50 personas siguen de-saparecidas. Las autoridades no descartaron encontrar más cadáveres bajo el lodo en los próximos días.

El nuevo balance de víctimas, entregado por el subsecretario de Interior, Mahmud Aleuy, incluye tres nuevas víctimas mortales en la catástrofe que afecta las regiones de Coquimbo, Atacama y Antofagasta. Asimismo, el director de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Ricardo Toro, afirmó que hay "altas posibilidades" de encontrar más cuerpos bajo el barro.

"Cuando hay 17 aluviones simultáneos y uno no tiene acceso por vía terrestres para revisar todo lo que pasará es que día a día existe la posibilidad de que haya más desaparecidos y fallecidos", sostuvo Toro.
La catástrofe ha causado un total de 26.406 damnificados, de los cuales 4.134 permanecen refugiados en los 30 albergues dispuestos por el Gobierno.

Entretanto, se ha contabilizado un total de 22.204 viviendas con daños menores y 5.904 con daños mayores a consecuencia de las lluvias torrenciales que azotaron el anterior martes el árido norte del país austral, provocando crecidas incontrolables de ríos que en algunos casos estaban secos desde hace más de 20 años. Para Toro, el suministro de agua potable es uno de los problemas más complejos que afronta la región de Atacama y Antofagasta, donde el número de hogares afectados asciende a 7.112.