Nicolás Maduro, un ex conductor de autobús de origen humilde es, para varios analistas y politólogos, el natural sucesor de Hugo Chávez a la cabeza del movimiento bolivariano que ostenta el poder en Venezuela desde hace 13 años y tiene asegurado el mando al menos hasta 2020.
Por muchos años canciller y mano derecha del Presidente, Maduro logró un importante avance en su carrera política al escalar a la vicepresidencia, el segundo cargo de mayor importancia en el país, pero manteniendo a la vez la titularidad de la cartera de Relaciones Exteriores.
Y las señales son contundentes. Tras su elección como vicepresidente -que muchos interpretaron incluso como un posible resguardo de Chávez en caso de que su salud empeore- el ascenso del político de 49 años se consolidó la noche del sábado cuando el jefe de Estado anunció su ratificación en la cancillería.
Evaluaciones
Según declaró Eduardo Gamarra, profesor de estudios latinoamericanos en la Universidad de Florida, al portal actualidad.com, Maduro basa su ascenso en su prestigio de “fiel cumplidor” de todas las tareas que Chávez le designó durante sus seis años como ministro.
El periodista y ex diplomático Vladimir Villegas afirmó a la agencia AFP que el nuevo Vicepresidente “se ajusta a la nueva etapa en la que (el Mandatario) quiere tener sus cuadros de mayor confianza” en puestos fundamentales.
El analista Ricardo Ríos agregó que era natural que Maduro pasara a la vicepresidencia porque es el “verdadero jefe político” del bando civil del chavismo, mientras que Elías Jaua (su antecesor) sólo era un representante de ese bloque en el Gobierno.
El sociólogo venezolano David Smilde -también consultado por actualidad.com- vaticinó que Maduro es un “más que un potencial sucesor de Chávez” porque, actualmente, es quien mejor podría continuar el proyecto izquierdista y las estrechas relaciones con Cuba cimentadas en los últimos años.
Ríos cree que Chávez prefirió a Maduro porque se está preparando para una “sucesión de poder”. Para Villegas, el Vice es “el cuadro más completo que tiene el Presidente” por la formación política que alcanzó desde su juventud como dirigente sindical, su “carisma” y su “prestigio internacional entre los aliados”.
Según la Constitución venezolana, el Vicepresidente asumirá el mando del país si se produjera una falta absoluta del Mandatario durante los dos últimos años de Gobierno, tal como muerte, renuncia o incapacidad mental.
Si la ausencia se produjera en los cuatro años anteriores del mandato, el Vicepresidente estaría encargado de convocar elecciones.
Todas las especulaciones y análisis cobran fuerza en el marco del recurrente cáncer que sufre Chávez desde el año pasado.
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