Piden austeridad a países ricos para frenar crisis

Los países ricos deben con sus políticas fiscales equilibrar la doctrina de la austeridad para salir de la actual crisis, dijo ayer en Tokio el comité financiero y monetario del Fondo Monetario Internacional (FMI). Christine Lagarde, presidente del FMI, consideró necesario que las economías avanzadas realicen un "ajuste fiscal a medio plazo creíble" cuyo "ritmo y tipo de medidas" estén ajustadas a cada economía.

Jalon de orejas. En un llamado de atención a Estados Unidos, el FMI dijo que la mayor economía mundial debe resolver el llamado "precipicio fiscal", una combinación de aumentos de impuestos y reducción del gasto público que se espera golpee el año próximo y que según los observadores podría destruir la recuperación económica. El organismo aseguró que a pesar de que en la eurozona se han producido "progresos significativos", serán necesarias medidas adicionales, en EEUU para "asegurar la sostenibilidad fiscal".

La exministra francesa de Economía destacó que el Comité del FMI, encargado de delinear las políticas del organismo, expresó en su reunión "con toda claridad" un compromiso "muy fuerte" con la implementación de las políticas destinadas a mejorar el escenario.

Lagarde destacó que actualmente, tras el incremento de los recursos del organismo en 461.000 millones de dólares en abril, la "red de seguridad mundial" del fondo es "real, no una ilusión".

Optimismo español. El ministro de Economía español, Luis De Guindos, aseguró ayer en Tokio que "el ambiente es de mucho mayor optimismo con respecto a España" que antes del verano y que "ahora mismo hay interés por la deuda pública española".

De Guindos explicó que el ambiente que ha palpado recientemente "tanto en los entornos del Fondo Monetario Internacional (FMI)" como entre analistas privados es "bastante más positivo que antes del verano", y que esto lo coteja el Tesoro Español con la procedencia de las órdenes de compra.

Mientras tanto, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Ollie Rehn, recomendó a algunos países europeos que hagan gala de flexibilidad en sus políticas de austeridad si la desaceleración actual se agrava, en un discurso pronunciado ayer ante el FMI, en Tokio."Los Estados miembros (de la UE) que disponen de márgenes de maniobra presupuestarios (...) deberían estar listos a revisar el ritmo de la consolidación (presupuestaria) si las condiciones macroeconómicas se agravan", declaró Rehn.