“Hoy, más que nunca sabemos, que lo mejor aún está por venir”. Con estas palabras el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, agradeció la confianza depositada por los votantes a su candidatura, la misma que le llevó a la reelección de la primera potencia mundial.
“Esta noche nuestra tarea de perfeccionar nuestra unión va hacia adelante. Los E stados Unidos somos una familia y conseguimos las cosas unidos”, dijo el mandatario ante un auditorio de cientos de simpatizantes demócratas que aplaudieron cada una de sus frases, especialmente aquellas dirigidas a reconocer el apoyo de su familia, en particular la primera dama, Michelle Obama, su vicepresidente Joe Biden y el equipo de campaña.
Pero también el presidente reconoció a su rival, el candidato republicano Mitt Romney, a quien tendió una mano para resolver los problemas troncales del país, especialmente aquellos relacionados con la crisis económica. “En las próximas horas, voy a pedir una reunión con Mitt Romney para analizar diversos aspectos importantes para el país”, señaló en medio de una cerrada ovación.
Asimismo, quien llevará las riendas de EEUU por los próximos cuatro años, ponderó la importancia de los estadounidenses “que defienden los principios de la democracia más allá de nuestras fronteras”, en referencia a las tropas americanas en diferentes teatros de operaciones. “Una década de guerras está llegando a su fin”, enfatizó.
Asimismo, Obama se comprometió públicamente a resolver la controversia sobre los impuestos, a mejorar los sistemas educativo y de salud y superar la crisis económica, haciendo especial hincapié en la necesidad de crear nuevas fuentes de trabajo.
“Lo que nos hace excepcionales es aquello que nos une. El papel de los ciudadanos en democracia no termina con el voto. Es nuestro patriotismo el que nos hace grandes. Ese es el país del que me siento orgulloso de liderar. Por ello tengo una gran esperanza en EEUU”, destacó el presidente que obtuvo una victoria sin paliativos cimentada, sobre todo, en el apoyo de las minorías étnicas. Para éstas tuvo unas significativas palabras: “Si en este país se quiere trabajar duro no importa de donde se venga, si es blanco, negro, asiático, latino, viejo, capaz o incapaz, homosexual, se puede conseguir en EEUU. ¡Sí se puede conseguir en EEUU y con la ayuda de Dios lo conseguiremos!”
Mientras Obama se dirigía a los estadounidenses y el mundo, las cadenas de televisión confirmaron su victoria superando los 270 votos del Colegio Electoral que garantizan su reelección. Obama también ganó en Virginia, según avanza The New York Times, lo que añadió 13 votos electorales elevando el recuento hasta 290 frente a los 203 obtenidos por Mitt Romney.
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