Vigo elige presidente en Perú

La calle Oporto se convirtió ayer por unas horas en un pedazo de Lima. Más de medio millar de peruanos residentes en Galicia se acercaron hasta el antiguo Rectorado para votar a alguno de los candidatos que se presentan a las elecciones estatales del país sudamericano. La obligatoriedad del voto en Perú y el deseo de participar en las decisiones políticas de su patria, concitó a un colectivo que conversaba en la cola sobre lo afectado que se está viendo por la crisis.

CARLOS PREGO La contienda electoral se reñía a miles de kilómetros de distancia pero –cosas de la globalización– su tensión se dejó sentir ayer en Vigo. Más de medio millar de los 1.534 peruanos con derecho a voto residentes en Galicia (el 36,5%) se acercaron ayer entre las ocho y las cuatro de la tarde al edificio del antiguo Rectorado –única mesa electoral en toda la comunidad y una de las 15 habilitadas en España– para escoger qué candidato sucederá a Alán García al frente de Perú: el nacionalista Ollanta Humala (favorito en las encuestas); el expresidente Alejandro Toledo, Pedro Pablo Kuczynski (más conocido como PPK) o Keiko Fujimori (hija del exdirigente preso por crímenes contra la humanidad Alberto Fujimori).

Las tres candidaturas encontraban ayer afectos y detractores en la calle Oporto. Guillermo Koescklin, nacido en la capital peruana pero residente en Galicia desde hace 38 años, explica que su voto apoyará la lista de Kuczynski. "Los últimos dos gobiernos han promovido el buen desarrollo económico del país y ahora esperamos que en una o dos legislaturas ese crecimiento revierta en las clases populares", explica el limeño. Sus argumentos no convencen a Ricardo Cruz, de la localidad de Callao, quien ve en Humala la mejor opción por sus afinidades con el socialismo moderado del exmandatario brasileño Lula da Silva. Entre ambos discursos se sitúa el del paiteño Todulo Chuma, partidario de Keiko Fujimori. "Sé que su padre cometió muchos errores, pero también consiguió derrotar el terrorismo", apunta.

Al margen de su sensibilidad política, Koescklin, Cruz y Chuma coincidían ayer al señalar que la crisis está llevando a muchos emigrantes a regresar a sus países de origen. Ninguno de ellos se plantea sin embargo la idea del retorno a Perú. "Aquí nadie se muere de hambre, pero en nuestro país, si no tienes trabajo, no tienes nada", proclama Cruz.