El presidente cubano, Raúl Castro, completó la “militarización” de su Gabinete en sus tres años al frente del Gobierno que cumple hoy y comenzó a desmantelar el paternalismo del Estado.
Al menos diez militares ocupan cargos en su Gobierno como ministros, viceministros o presidentes de organismos estratégicos en el aparato estatal.
Operación renovación
Desde que accedió a la Presidencia el 24 de febrero de 2008, Raúl Castro, de 79 años, anteriormente ministro de las Fuerzas Armadas, destituyó a cinco vicepresidentes (Carlos Lage, Otto Rivero, Jorge Luis Sierra, Pedro Miret y Osmany Cienfuegos) y a los ministros de Educación, Relaciones Exteriores, Azúcar, Transporte, Industria Básica, Industria Ligera, Economía, Construcción, Recursos Hidráulicos, Salud, Telecomunicaciones así como al presidente del Instituto de Aeronáutica Civil y al fiscal general.
En septiembre pasado puso a un coronel al frente de la mayor corporación comercial del país, CIMEX. “Ya tiene el Gobierno que él quería. Ha puesto a los militares en las esferas principales”, comentó a ANSA Manuel Cuesta Morúa, líder de Arco Progresista, de tendencia socialdemócrata, que destaca que con Raúl Castro en el poder aumentó la represión contra los opositores al régimen.
A partir de hoy, Raúl Castro encarará la preparación del Congreso del P artido Comunista de Cuba a realizarse en abril con el único objetivo de “socializar las reformas económicas que pretenden insertar a Cuba en la modernidad”, señala RFI.
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