Los millones de Gadafi que, según muchos analistas, son en realidad los millones de Libia, podrían finalmente ser revertidos al Estado, ante lo cual la sociedad se pregunta si serán adecuadamente gestionados por la nueva cúpula del país.
Muchos centros comerciales de Trípoli están cerrados desde hace semanas. En las calles, comerciantes establecieron puestos en los que venden pan, papas, cebolla, tomates, uvas y plátanos.
Los precios se dispararon en las últimas semanas del dominio de Gadafi y una delgada torta de pan cuesta ahora 75 dirhams, unos 50 centavos de dólar, casi el doble que antes.
Pero Libia tiene mucho dinero. En todo el mundo se identificaron bienes por unos 120 mil millones de dólares que fueron dispuestos discrecionalmente por Gadafi, y que ahora deberán volver al control público.
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